El equipo de Miguel Rumi jugó bien solo por pasajes, encontrando su característico fútbol en un cuarto de hora del primer tiempo y en algunos esporádicos momentos del complemento, pero no obstante ello logró el triunfo, cimentado como siempre en un ataque veloz, preciso y ahora con efectividad en la red.
Paralelamente, la defensa se mostró con más firmeza, sobre todo en la primera etapa, donde después de algunos minutos de juego deslucido se vio lo mejor del equipo a partir de los 18 minutos, cuando Vladimir Ascani habilitó al eterno goleador Néstor Belloso, para que este se reencontrara con la red.
En el mejor cuarto de hora del cotejo, los auriazules marcaron una nueva diferencia a través de una buena combinación ofensiva que definió Daniel González, poniendo un resultado que llevaba tranquilidad.
En el complemento, Once Tigres volvió a mostrar algunos momentos de confusión, aunque sin grandes sobresaltos, más allá del descuento por parte de Punta, a los 10 minutos, y una gran tapada de Facundo Cacho ante un delantero granate.
Pese a que como los hinchas lo han marcado en este blog, el equipo no logra encontrar desarrollar todo su potencial en el campo de juego, sigue logrando ser más que sus rivales y marca diferencia en la tabla de posiciones, lo que entrega tranquilidad para seguir mejorando.
Tras el receso por las elecciones llegará un partido crucial frente a los Rojos, ya que de ganar, el Tigre se cortaría mucho más en la punta. Nos vemos TODOS entonces en el Palomar, para seguir de fiesta y “atender” como tantas veces a los Rojos… y que los “tercos” se pongan cada vez más nerviosos (ya están para el rivotril!!!).
